Factores de riesgo
- Infección crónica por el virus de la hepatitis B o C
- Cirrosis
- Hígado graso
- Consumo excesivo de alcohol
- Tabaquismo
- Hemocromatosis hereditaria
- Sobrepeso u obesidad
- Ingesta de aflatoxinas en nueces, trigo, maíz o arroz contaminado por hongos